El próximo 4 de marzo se conmemora el Día mundial Obesidad y por tal motivo les compartimos una nota escrita por la Dra. Leticia Peroni donde explica en detalle datos importante a tener en cuenta y conocer sobre la Obesidad.
La obesidad se define mediante el índice de masa corporal (IMC), que se calcula utilizando el peso y la altura de una persona.
Clasificación del IMC en adultos:
● Peso inferior al saludable: IMC inferior a 18.5
● Peso saludable: IMC entre 18.5 y 24.9
● Sobrepeso: IMC entre 25 y 29.9
● Obesidad: IMC de 30 o más
La circunferencia de la cintura también es un factor importante, ya que la obesidad central (acumulación de grasa en el área abdominal) se considera un riesgo, incluso si el IMC está dentro de los rangos normales. Una circunferencia de cintura superior a 88 cm en mujeres y 102 cm en hombres está asociada con un mayor riesgo de complicaciones relacionadas con la obesidad.
Riesgos para la salud
La obesidad aumenta significativamente el riesgo de desarrollar diversos problemas de salud, entre los cuales se incluyen:
● Diabetes
● Hipertensión (presión arterial alta)
● Colesterol elevado
● Enfermedades cardíacas, como infartos
● Accidente cerebrovascular
● Apnea del sueño
● Asma
● Cáncer
● Muerte prematura
● Dificultades para moverse, respirar y realizar actividades diarias
La obesidad central, en particular, también puede incrementar el riesgo de una muerte temprana.
En los niños, la obesidad está asociada con problemas como diabetes, hipertensión, asma y apnea del sueño.
Causas de la obesidad
Aunque los factores genéticos pueden influir, el estilo de vida tiene un impacto mucho mayor en el desarrollo de la obesidad. Los factores que contribuyen incluyen:
● Comer en exceso
● Alimentación poco saludable
● Falta de actividad física
● Sedentarismo (ver demasiada televisión)
● Hábitos maternos durante el embarazo
● Aumento de peso en la infancia
● Poca cantidad de sueño
● Uso de ciertos medicamentos
● Trastornos hormonales
Tratamientos y prevención
La manera más efectiva de prevenir los problemas asociados con la obesidad es lograr una pérdida de peso saludable.
Estrategias para mejorar la salud y reducir riesgos
● Aumentar la actividad física.
● Mejorar la dieta: comer porciones más pequeñas, en intervalos regulares, y reducir el consumo de dulces y alimentos procesados.
● Dejar de fumar.
● Limitar el consumo de alcohol.
Llevar un diario de alimentos, actividad física y peso puede ser útil para alcanzar las metas propuestas.
Existen medicamentos y procedimientos quirúrgicos disponibles para ayudar a perder peso, pero estos tratamientos están destinados a personas que no han logrado adelgazar mediante cambios en su estilo de vida.
Es importante recordar que los tratamientos para bajar de peso no sustituyen una dieta saludable ni el ejercicio físico.
Medicamentos para bajar de peso
Estos medicamentos actúan reduciendo el apetito o alterando la forma en que el cuerpo digiere los alimentos. Algunos ejemplos incluyen:
● Tirzepatida (Zepbound, Mounjaro)
● Semaglutida (Wegovy, Ozempic)
● Liraglutida (Saxenda)
● Fentermina y topiramato (Qsymia)
● Naltrexona y bupropión (Contrave)
● Orlistat (Xenical, Alli)
Cabe señalar que estos medicamentos pueden tener efectos secundarios.
Cirugía para bajar de peso
La cirugía reduce el tamaño del estómago y/o cambia el recorrido de los alimentos en el sistema digestivo. Sin embargo, no es una opción adecuada para todas las personas.
Existen diferentes tipos de cirugía, como el bypass gástrico y la manga gástrica. La cirugía bariátrica solo se recomienda cuando otras opciones de pérdida de peso no han tenido éxito y el IMC es superior a 35, o superior a 30 en personas con problemas de salud relacionados con la obesidad.
Este es un resumen general. Consulte siempre a un profesional de la salud para recibir orientación médica específica y personalizada.
Nota provista por la Dra. Leticia Peroni, Médica de staff de los servicios de Endocrinología y Diabetes y Metabolismo