Las doctoras Eliana Pahura y Leticia Peroni del Servicio de Endocrinología explican acerca de la acromegalia. Una patología poco frecuente aunque existente y de la que se desconoce bastante. Qué es? ¿Cómo se manifiesta y cómo se trata?
¿Qué es la acromegalia?
La acromegalia es una enfermedad caracterizada por el crecimiento anormal de ciertas partes del cuerpo a lo largo de un tiempo prolongado, generalmente en el transcurso de los años. Esta condición suele estar provocada por un tumor no canceroso en la glándula pituitaria, que está ubicada en la base del cerebro y es responsable de producir varias hormonas, incluyendo la hormona del crecimiento.
Cuando el tumor en la glándula pituitaria genera un exceso de hormona del crecimiento, esta hormona provoca un crecimiento desmedido en diferentes áreas del cuerpo.
¿Cuáles son los síntomas de la acromegalia?
Los principales síntomas de la acromegalia incluyen:
- Cara y cabeza: Aumento de tamaño en la nariz, labios, orejas y frente. La lengua y la mandíbula también pueden agrandarse, creando separación entre los dientes.
- Garganta: El tejido alrededor de la laringe puede engrosarse, lo cual puede hacer la voz más grave y dificultar la respiración durante el sueño.
- Manos y pies: Las extremidades suelen agrandarse, haciendo que anillos y zapatos queden ajustados. Algunas personas también desarrollan el síndrome del túnel carpiano, que genera dolor o entumecimiento en manos y dedos.
- Piel: La piel puede engrosarse y pueden aparecer pequeños crecimientos cutáneos, conocidos como verrugas.
- Huesos: Los extremos de los huesos pueden crecer excesivamente, dañando el cartílago y provocando artritis.
- Corazón: El músculo cardíaco puede agrandarse, afectando la función cardíaca, y existe una mayor probabilidad de desarrollar presión arterial alta.
Además, si el tumor en la glándula pituitaria crece en exceso, puede presionar los nervios que llegan a los ojos, causando problemas de visión. La acromegalia también aumenta el riesgo de desarrollar diabetes y ciertos tipos de tumores benignos, como pólipos en el colon.
¿Cómo se diagnostica?
El diagnóstico suele comenzar con la observación de los cambios físicos característicos. Un análisis de sangre puede confirmar la presencia de niveles elevados de hormona del crecimiento. Si los niveles son altos, se realiza una resonancia magnética para verificar la existencia de un tumor en la glándula pituitaria.
¿Cómo se trata?
Los tratamientos disponibles incluyen:
- Cirugía: Es el tratamiento más común y consiste en extirpar el tumor a través de un pequeño corte en la nariz, lo que permite reducir los niveles de hormona del crecimiento en pocas horas. Algunos síntomas mejoran gradualmente en meses.
- Medicamentos: Si el tumor no se puede extraer por completo, existen tres opciones de medicamentos.
- Radiación: En algunos casos, se utiliza radioterapia para destruir el tumor.
Cada tratamiento tiene posibles efectos secundarios, y el médico elegirá el tratamiento más adecuado según cada caso.
¿Cómo es la vida con acromegalia?
Con los tratamientos adecuados, la mayoría de las personas con acromegalia logran una buena calidad de vida. Es fundamental realizar chequeos periódicos para evaluar la efectividad del tratamiento y realizar ajustes cuando sea necesario.
Fuente de información: Servicio de Endocrinología de Clínica La Pequeña Familia